Barcelona destinará este año 46,6 millones de euros a ayudas a la rehabilitación de viviendas para garantizar el derecho a la habitabilidad digna para todo el mundo y, en definitiva, mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y ciudadanas. Con este objetivo, las líneas de subvenciones de este 2017 pondrán especial énfasis a dar un nuevo impulso a las medidas de ahorro energético y promover las obras de mejora de los interiores de los pisos. A la vez, se preverán mecanismos para garantizar la estabilidad de los locatarios en los edificios renovados.
Se trata de un conjunto de actuaciones enmarcadas en las políticas de rehabilitación que está llevando a cabo el Gobierno municipal para que las viviendas de la ciudad sean accesibles, tengan las condiciones idóneas de confortabilidad térmica y aislamiento acústico y dispongan de instalaciones adecuadas y entregas de materiales contaminantes. Este año se da un paso adelante en la nueva mirada social que supuso la incorporación el año pasado de baremos sociales en las ayudas y subvenciones a obras hechas en el interior de los pisos.
El año 2016 se incorporó como novedad un tipo de ayuda específica para mejorar las condiciones de los interiores de las viviendas. Se concedían subvenciones para hacer obras que permitan lograr la habitabilidad; mejorar la accesibilidad; hacer actuaciones de aislamiento acústico o mejorar la calidad y el confort del aire interior, y actuaciones destinadas a la eliminación de materiales nocivos para la salud de las personas. Esta parte del programa de rehabilitación se mantiene y se ampliará este año.
Nuevas medidas energéticas
Las actuaciones energéticas, introducidas también como novedad en la edición de 2016, continúan en esta convocatoria y suman algunas novedades. Se fomentarán medidas para reducir el consumo energético de los edificios, atacar situaciones de pobreza energética, mejorar la salud y reducir la dependencia energética dirigiendo los edificios hacia la autosuficiencia energética.
La convocatoria de ayudas a la rehabilitación 2017 que ha aprobado el Consorcio prevé subvenciones para abordar obras que resuelvan patologías estructurales de edificios de viviendas. Las obras por mejoras en la accesibilidad de las viviendas, con la supresión de barreras arquitectónicas o la instalación de ascensores también están previstas en esta convocatoria.
También se continúa ofreciendo un programa de ayudas dirigidas a conjuntos urbanos específicos. Finalmente, se otorgarán subvenciones para usar materiales con baja huella ecológica en las intervenciones que se lleven a cabo, y para edificios catalogados.