El Ayuntamiento de Murcia se ha adherido a las actuaciones contra el cambio climático. Una vez calculada la huella, el objetivo es incorporar la ciudad a los 40 municipios de toda España que ya figuran en el Registro Nacional de Huella de Carbono.
Los resultados obtenidos para el Ayuntamiento de Murcia (0,064 t CO2eq por habitante) son inferiores al ratio del resto de ciudades inscritas en este censo, con la única excepción de Alicante. En este sentido, el Ayuntamiento ha fijado el objetivo de reducción del 8% de las emisiones hasta 2020, equivalente a un 2% anual, lo que supone 2.243 tonCO2 eq, alcanzando un valor objetivo total de 25.795 t CO2eq.
Esta iniciativa cuantifica el conjunto de emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la actividad diaria del Ayuntamiento durante un año, incluyendo:
- Alcance 1: Las emisiones directas generadas por el consumo de combustibles de la flota de vehículos municipales, por el consumo de combustibles para calefacción de edificios e instalaciones municipales y las emisiones generadas por el escape de gases refrigerantes en equipos de climatización.
- Alcance 2: Las emisiones indirectas causadas por el consumo de energía eléctrica en edificios e instalaciones municipales.
Huella ecológica
Por otra parte, la Concejalía de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta ha querido ir un paso más allá de los requisitos establecidos y ha calculado también su huella ecológica, lo que le convierte en primer ayuntamiento de una gran ciudad que determinó este valor respecto a 2015. En él se indica la superficie de tierra productiva necesaria para satisfacer consumo de electricidad y combustibles fósiles de los servicios que el Ayuntamiento presta a sus ciudadanos. En 2015 este índice fue de 79,5 km2/año, lo que supone una huella per cápita de 180 m2/habitante.
Antonio Navarro Corchón ha señalado que el objetivo final pretendido con el cálculo de ambas marcas es “conocer qué medidas y con qué intensidad debemos aplicarlas para reducir los factores que inciden en el deterioro de la calidad ambiental de la ciudad”.
Determinar este indicador no es una herramienta exclusiva para la administración, puesto que se pueden implementar por las empresas, instituciones e incluso en las viviendas. Para ello, el Ayuntamiento va a ofrecer próximamente talleres de formación en huella de carbono para empresas similares a los que se realizaron el año pasado.