La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, y el alcalde de Oliva, David González, han firmado el convenio de colaboración para gestionar las actuaciones del Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) de este municipio para la anualidad del 2017, en el marco del Plan Estatal de Vivienda 2013-2016, que permite que las actuaciones se ejecuten hasta 31 de diciembre de 2017.
El convenio firmado contempla la aprobación de la anualidad de 2017 con una subvención de 1.611.000 euros; de esta cantidad, la Generalitat aportará 376.000 euros y el Ministerio de Fomento 1.235.000 euros. En 2016, se declaró el ARRU del casco antiguo de Oliva y se estimó el coste total de la actuación en 3.999.000 euros, a aportar por el Ministerio de Fomento, la Generalitat, el Ayuntamiento y los particulares.
Las actuaciones para el Área de Regeneración y Renovación Urbana del casco antiguo de Oliva incluyen la edificación de 12 viviendas, con calificación energética mínima tipo «B». Así como las obras de reurbanización necesarias y la realización de las funciones de gestión técnica e información a través de un equipo técnico. De igual manera, se han programado actuaciones dirigidas a la rehabilitación de 60 viviendas, con obras de recuperación de elementos estructurales del edificio, accesibilidad, adecuación de elementos comunes y habitabilidad de las mismas.
Consolidar las ciudades
Para María José Salvador, la Generalitat está apostando «por la consolidación de las ciudades, por la recuperación y regeneración de aquellos cascos históricos que por su antigüedad, y por haber sufrido el abandono de las anteriores administraciones, se encuentran degradados y precisan de intervenciones tanto en viviendas como en los espacios urbanos que las circundan». «De esta manera,-ha dicho la consellera- lo que se pretende es recuperar unas zonas donde los vecinos puedan vivir con más calidad de vida».
Además, ha añadido Salvador, la rehabilitación y la regeneración urbana no sólo son fundamentales para renovar viviendas y recuperar espacios urbanos en los cascos históricos, sino que estas actuaciones son también importantes para «reactivar la economía local y para ayudar a los sectores productivos relacionados con la construcción como los fontaneros, electricistas, carpinteros, pintores, etc».