El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, afirmó que el ecobarrio de A Ponte, en Ourense, convertirá a Galicia y a la ciudad de As Burgas en un ejemplo de transformación urbana sostenible que reproduce a pequeña escala, a nivel de barrio, lo que van a ser las ciudades europeas del futuro.
Durante el acto de presentación del proyecto, en el cual también participó el comisario de Acción por el Clima y Energía de la Comisión Europea, Miguel Arias Cañete, Feijóo aseveró que con este proyecto Ourense se transforma en una ciudad pionera en la lucha contra el cambio climático, en la reducción de consumo energético y en el aprovechamiento de los recursos naturales energéticos.
Además de ponerse nuevamente de manifiesto el potencial de la Autonomía en el ámbito de las energías renovables. Sobre este punto, precisó que con la puesta en marcha del primer ecobarrio en la Comunidad, Galicia pasará a ser un referente en geotermia.
No en vano, uno de los principales objetivos será establecer en la zona a primera red de geotermia de Europa, aprovechando esta fuente de energía para abastecer de calefacción y agua caliente a medio centenar de edificios del entorno.
Puesta a punto de fachadas y envolventes térmicas
Con una inversión de 20 millones de euros y la creación de 300 puestos de trabajo, el titular de la Xunta recordó además que esta iniciativa prevé mejorar la eficiencia energética un 20%, que el 20% de la energía consumida provenga de fuentes renovables y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero un 30%.
Además, el proyecto recoge también la puesta a punto de fachadas y envolventes térmicas en colegios, institutos y otros inmuebles como la futura estación intermodal; el relevo de la iluminación actual por tecnología led, tanto en los edificios como en las calles; el fomento de la movilidad sostenible; y la puesta en marcha de la Oficina del ecobarrio, para informar a la comunidad de vecinos y a las asociaciones sobre las ayudas y actuaciones en materia de eficiencia energética.
El presidente de la Xunta afirmó que las energías renovables y el aprovechamiento de los recursos naturales seguirán desempeñando un papel fundamental, como prueba la puesta en marcha de las Directrices Energéticas de Galicia que, con una movilización de 3.000 millones de euros hasta 2020, fomentará la cultura de la eficiencia energética en los hogares, empresas y administraciones.