La empresa pública de vivienda y urbanismo del Gobierno de Navarra, Nasuvinsa, ha iniciado los trámites para licitar la puesta en marcha y explotación de la Central de Calor de la Txantrea.
Se trata de un novedoso y ambicioso proyecto vinculado a la rehabilitación energética de este barrio pamplonés, que dará suministro a las redes de calefacción y agua caliente de más de 4.500 viviendas y varios edificios dotacionales, utilizando además la biomasa forestal como fuente de energía renovable.
La utilización de la biomasa forestal como fuente renovable de origen local, la introducción de la eficiencia energética en la rehabilitación de edificios o la reducción en un 80% de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en este ámbito son algunos de los factores que convierten a la Central de Calor de la Txantrea en un proyecto pionero en el Estado.
Período de información pública
Nasuvinsa ha publicado en el Boletín Oficial de Navarra (BON) el período de información pública, durante un mes, del anteproyecto de construcción y explotación de la red de calor en el barrio de la Txantrea, así como del estudio de viabilidad del posterior contrato de concesión.
La documentación técnica y económica está disponible en la página web de Nasuvinsa.
Un proyecto de Efidistrict
Nasuvinsa ha pilotado en la Txantrea, en colaboración con el Ayuntamiento de Pamplona, el proyecto Efidistrict de rehabilitación y regeneración energética integral (envolventes térmicas y renovación de redes), cuyas primeras obras arrancaron hace ahora un año en una veintena de edificios de las agrupaciones de vivienda social de Orvina y que ahora ha duplicado su ámbito de actuación, extendiéndose a otras zonas del barrio.
Esta novedosa intervención urbanística global se complementa ahora con la licitación, instalación y explotación de una Central de Calor de inversión público-privada.
Detalles de la central térmica
La central térmica estará ubicada en el acceso a Orvina por la Ronda Norte (PA-30). Tras el proceso de licitación del proyecto, adjudicación de las obras y período de construcción, estará ya en pleno rendimiento en 2020, ampliándose a una segunda fase a partir de 2023.
En la primera fase tendrá una capacidad de producción térmica de 14,5 MW y tres años después se duplicará hasta alcanzar los 29 MW.
Esta infraestructura alimentará inicialmente las redes de calefacción y agua caliente de más de la mitad de las 8.000 viviendas que integran la Txantrea, con vocación de extender también el suministro al resto del barrio y al municipio colindante de Burlada, así como a varios edificios asistenciales y de servicios situados en el entorno de la central.
Inversión total
La central de la Txantrea implica en su conjunto una inversión total de más de 13,6 millones de euros entre las dos fases. La sociedad pública Nasuvinsa invertirá 6,4 millones de euros en obras y urbanización para poner en marcha el proyecto, y el resto de la inversión correrá a cargo de la empresa que resulte adjudicataria en el procedimiento de licitación que se abrirá después del verano, que regulará el contrato de concesión para la construcción y explotación de la central por un período de 25 años.
La concesionaria será retribuida directamente por medio del precio que abonen los vecinos usuarios de su servicio y, a su vez, abonará a Nasuvinsa un canon anual por la explotación.