Bajo el título Contaminación atmosférica: nuestra salud no tiene todavía la suficiente protección, un nuevo informe del Tribunal de Cuentas Europeo destaca que las medidas de la Unión Europea para proteger a los ciudadanos de la contaminación no han producido el impacto esperado.
Según señalan, cada año la contaminación atmosférica causa aproximadamente 400.000 muertes prematuras en la UE y genera cientos de miles de millones de euros en costes externos ligados a la salud. Sin embargo, como alertan los auditores, este coste humano y económico todavía no se ha traducido en medidas adecuadas para toda la UE.
Añaden además que las partículas, el dióxido de nitrógeno y el ozono troposférico son los contaminantes atmosféricos responsables de la mayoría de muertes prematuras a los que la población urbana está especialmente expuesta.
Calidad del aire
La directiva sobre la calidad del aire ambiente de 2008 constituye la base de la política sobre aire limpio de la UE, puesto que establece las normas de calidad atmosférica relativas a la concentración de contaminantes en el aire. Los auditores del informe evaluaron la concepción de la directiva, si los Estados miembros la habían aplicado eficazmente, y la forma en que la Comisión había controlado y velado por su cumplimiento.
Por otro lado, han valorado si la calidad del aire se reflejaba adecuadamente en otras políticas de la UE y estaba asistida por fondos de la UE, y si los ciudadanos estaban bien informados sobre los asuntos relativos a la calidad del aire.
«La contaminación supone el mayor riesgo medioambiental para la salud en la Unión Europea», afirma Janusz Wojciechowski, miembro del Tribunal de Cuentas Europeo responsable del informe. “En las últimas décadas, las políticas de la UE han contribuido a reducir las emisiones, pero el progreso de la calidad del aire ha sido dispar y aún se dan efectos considerables en la salud pública”, añade.
Conclusiones
El informe revela que las normas de calidad del aire de la UE se establecieron hace casi veinte años y algunas de ellas son mucho menos estrictas que las directrices de la Organización Mundial de la Salud y lo que sugieren las últimas pruebas científicas.
Asimismo, entre otras conclusiones se afirma que pese al descenso de los contaminantes atmosféricos, la mayoría de los Estados miembros no cumplen todavía las normas de la UE relativas a la calidad del aire ni han adoptado suficientes medidas eficaces para mejorarla.
Recomendaciones
Con el fin de mejorar la calidad del aire de la UE, los auditores recomiendan que:
- La Comisión Europea emprenda medidas más eficaces.
- Se actualice la directiva sobre la calidad del aire ambiente.
- Se priorice la política sobre la calidad del aire y se integre en otras políticas de la UE.
- Mejore la concienciación y la información de los ciudadanos.