El centro de la ciudad de Valencia cuenta con una nueva estación de medición de emisiones con la que la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural del Gobierno valenciano quiere reforzar el control de la calidad del aire en la zona.
Esta nueva instalación, perteneciente a la Red Valenciana de Vigilancia y Control de la Contaminación Atmosférica, se ubica en la plaza del Ayuntamiento de Valencia, junto a la estatua de Francesc de Vinatea. Se enmarca en la actualización del Plan de Mejora de la Calidad del Aire de la Aglomeración ES1016: L’Horta (Valencia y Entorno Metropolitano) que la Consejería lleva a cabo con la corporación municipal.
Plan de Mejora de la Calidad del Aire
Este Plan de Mejora de la Calidad del Aire tiene como objetivo la reducción de los niveles de emisiones de óxidos de nitrógeno en Valencia, con el fin de dar cumplimiento a las exigencias normativas relativas a la gestión y evaluación de la calidad del aire ambiente. Una de las medidas propuestas en este plan consiste en la instalación de una estación de medición con equipos de óxidos de nitrógeno y partículas: PM10 y PM2,5.
Para la ubicación en el centro de Valencia se han tenido en cuenta los resultados obtenidos en las sucesivas campañas de mediciones complementarias realizadas por parte de la Consejería, en toda el área metropolitana (aglomeración de L’Horta) de dióxido de nitrógeno.
Objetivos de la estación de medición
Con esta estación de medición se pretende evaluar la contribución a la mejora de la calidad del aire en la zona de determinadas medidas y actuaciones reflejadas en el citado plan, encaminadas a la restricción del tráfico rodado en el centro histórico y la ampliación de zonas peatonales.
En concreto, medirá en continuo tanto los niveles de partículas, como los niveles de óxidos de nitrógeno, un contaminante directamente relacionado con las emisiones debidas al tráfico en las zonas urbanas.
Las campañas de medición determinan que los niveles más elevados de este contaminante se sitúan en las zonas centro de la ciudad, donde la dispersión de las masas de aire es menor y por tanto los niveles de concentración de este contaminante pueden llegar a ser más elevados que en otras zonas con mayor tráfico pero más amplias, como grandes avenidas.