La empresa Danosa, experta en fabricación de productos y sistemas de impermeabilización, aislamiento acústico y térmico para edificación, está comprometida con el cuidado del medio ambiente a través de procesos de valorización de sus materiales. Manuel del Río, CEO de Danosa, nos cuenta en esta entrevista la línea de trabajo que sigue la compañía hacia la economía circular y la sostenibilidad.
CONSTRUIBLE: ¿Cuál es la filosofía de Danosa respecto a la sostenibilidad de los materiales? En los últimos años, la compañía ha adaptado sus soluciones para cumplir con los estándares de construcción sostenible, ¿en qué han consistido estas acciones? ¿Con qué tipo de material trabaja la marca y qué puede aportar a una construcción o rehabilitación sostenible?
Manuel del Río: En Danosa estamos convencidos de que el sector de la fabricación de materiales de construcción debe lograr un equilibrio entre el desarrollo y el progreso con la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente. Por eso, desde hace algunos años consideramos que la eficiencia energética y el reciclado deben ser dos importantes palancas de nuestro crecimiento.
Atendiendo a esta filosofía, hemos logrado introducir materiales reciclados en los procesos de producción y hacer posible que estos deshechos se conviertan en materias primas útiles para la fabricación de productos. Sin ir más lejos, en 2018, Danosa recicló más de 8.000 toneladas de plásticos e introdujo poliestireno reciclado equivalente a 18 millones de cajas de pescado para la fabricación de sus materiales de aislamiento térmico. Todo ello, a través de su filial ‘Renovación Sostenible’ que canaliza su actividad de reciclado desde el año 2012.
Gracias a este tratamiento de valorización de deshechos, y a los certificados y declaraciones ambientales de producto que hemos obtenido, artículos de nuestras líneas de impermeabilización y aislamiento puntúan en las certificaciones medio ambientales de edificios como VERDE, BREEAM y LEED.
También en los últimos años hemos diseñado soluciones muy comprometidas con el medioambiente como la gama NOX de nuestros sistemas de impermeabilización bituminosa. Se trata de una solución descontaminante fotocatalítica que disuelve el NOx y otras sustancias contaminantes de los vehículos a partir de la luz solar. De hecho, según datos que se barajan en el sector, una cubierta tipo de 1.000 m2 en la que se incorpore esta solución podría degradar anualmente el NOx emitido por más de 500 vehículos.
CONSTRUIBLE: Danosa ha impulsado recientemente su compromiso con la economía circular, ¿podrías contarnos en qué consiste? ¿Cuáles son los logros conseguidos en este ámbito y los retos ante los que tenéis que hacer frente?
Manuel del Río: Danosa ha reforzado su línea de negocio dedicada a la valorización de materiales y a su compromiso con la economía circular con la compra de EPS20 Fischer, la filial portuguesa de la empresa alemana Fischer, dedicada al reciclaje de plásticos. La estrategia consiste en introducir progresivamente materiales reciclados en nuestros procesos y convertir los residuos en recursos útiles para la fabricación de nuevos productos.
Nuestra filial de reciclado, Renovación Sostenible, ya se ha convertido en el principal proveedor del grupo, al conseguir dar una segunda vida a un producto que actúa como materia prima dentro de nuestro proceso de fabricación del Aislamiento Térmico (XPS), por lo que su impacto se sitúa en una reducción de costes mediante una reducción de nuestro ratio de materiales, ya que nos permite sustituir materia prima virgen (más cara y procedente del sector petroquímico) por material reciclado.
Nuestro principal logro es poder desarrollar soluciones dedicadas al confort térmico en el interior de los edificios respondiendo siempre a este compromiso con la economía circular. Ejemplo de ello es nuestro sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE) Danotherm XPS.
CONSTRUIBLE: ¿Cuáles son las medidas o iniciativas que toma Danosa relacionadas con el reciclaje de plásticos, y en línea, por ejemplo, con la Estrategia de Plásticos de la UE?
Manuel del Río: Bajo esta filosofía que gira alrededor de la economía circular, la unidad de negocio de Danosa dedicada al reciclaje de plásticos tiene dos vertientes. Por un lado, reducir los residuos que nuestra propia compañía genera como industria y, por otro, recortar a nivel general el volumen de plásticos que van al vertedero, en línea con estrategia de residuos cero europea.
CONSTRUIBLE: Una de las soluciones de Danosa es el aislamiento térmico Danopren XPS, ¿qué características reúne este material que le hace destacar sobre otras soluciones?
Manuel del Río: Nuestros sistemas de aislamiento térmico Danopren XPS pueden reducir hasta un 70% el consumo energético de los edificios, si se instalan en cubiertas y fachadas. Y es que este material reúne una serie de características que lo diferencian de los que se han venido utilizando tradicionalmente al potenciar ese efecto aislante, sobre todo en los Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE).
Además de ser un producto 100% fabricado en España, posee mayor resistencia térmica que otros aislamientos. Es decir, para alcanzar un grado de aislamiento determinado será necesario un menor espesor, menor cantidad de material. Igualmente, no absorbe agua, tiene una estructura de célula cerrada que permite a su vez su “transpirabilidad”, debido a su resistencia a la difusión del vapor de agua suficientemente adecuada para no provocar condensaciones intersticiales. Y también es una buena opción cuando se necesita la máxima resistencia a la compresión, dado que su deformación a largo plazo es prácticamente inapreciable.
Posee diferentes aplicaciones y puede ser utilizado en diferentes partes del edificio como en cubiertas, fachadas, suelos o estructuras enterradas como muros, soleras o losas de cimentación. Asimismo, la instalación del XPS es fácil y de rápida ejecución, no requiere especiales medidas de protección para su manejo, las planchas son ligeras, fáciles de manipular, y presentan menos juntas.
Estas prestaciones están recogidas por el Marcado CE de Conformidad Europea, con las marcas de calidad voluntarias de AENOR (en España) y de ACERMI (en Francia) y con la Declaración Ambiental de Producto (DAP) verificada por auditores externos, lo que permite el ecoetiquetado del producto y su incorporación a proyectos de edificios sostenibles como Verde, LEED o BREEAM.
Por último, en el caso concreto de Danosa, un equipo especializado proporciona soporte técnico en todas las fases del proyecto, desde el diseño hasta la ejecución, con supervisiones en cálculos de aislamiento, en condensaciones, cargas admisibles, envolventes térmicas o asesoramiento técnico durante la obra o estudio de puentes térmicos.
CONSTRUIBLE: ¿Qué novedades podrías adelantar sobre Danosa? ¿Cuál es la estrategia a medio y largo plazo de la compañía?
Manuel del Río: Sin duda, la eficiencia energética y el reciclado serán dos de los conceptos sobre los que girarán nuestras innovaciones en el corto-medio plazo. Además del diseño de sistemas integrales que aúnen soluciones ‘todo en uno’ para responder a las necesidades que surgen en el sector.
Nuestra estrategia a medio y largo plazo continuará centrándose particularmente en la diversificación y la internacionalización del negocio, la misma que nos ha permitido crecer en los últimos años. En esa diversificación ha tenido mucho que ver nuestra política de adquisición, pues en los últimos años Danosa ha comprado otras nueve empresas y ha desarrollado dos joint-venture que ya se encuentran operando y cosechando beneficios. Entre estas compañías destacan precisamente dos en Portugal (Eurofoam y Quimidois), tres en España (la unidad de negocio de Argos Derivados del Cemento en Granada, la planta de la química BASF en Tudela y Sani en Granada) y dos en Reino Unido (Cefil y Nord Bitumi).
CONSTRUIBLE: ¿Hacia dónde creéis que va a evolucionar el sector de la construcción en general y qué consideráis que deben hacer las empresas para afrontarlo?
Manuel del Río: Si algo hemos aprendido de la crisis económica es que no se puede volver a construir de cualquier manera. Atrás quedó la construcción desmedida donde ‘la cantidad’ era lo único que importaba. El foco del sector de la construcción debe estar ahora en la calidad técnica de las soluciones y su puesta en obra, con una visión 360 y atendiendo siempre a la sostenibilidad y eficiencia. Es necesario que las empresas (fabricantes e instaladores) emprendan un cambio de cultura hacia lo cualitativo, confiando siempre en el valor de la prescripción de los expertos profesionales.