La residencia de Camarzana de Tera (Zamora), cuya construcción ha finalizado recientemente y ya se encuentra operativa, ha sido diseñada bajo parámetros de sostenibilidad y adaptabilidad al entorno consiguiendo un edificio de consumo de energía casi nulo. El aislamiento de las fachadas y cubiertas, la energía solar que abastece el 100% de la energía consumida, el sistema de construcción industrializado y la cubierta ajardinada, son algunas de las características que describen esta residencia de ancianos.
Gracias a la instalación de un total de 76 placas fotovoltaicas para la producción de energía eléctrica la residencia tiene un 100% de autoconsumo y la energía sobrante abastece a un edificio contiguo de la misma propiedad. Además, la residencia dispone de sistemas aerotérmicos para la climatización mediante suelo radiante/refrescante, así como recuperadores de calor para minimizar el gasto en calefacción y refrigeración.
Construcción modular y medidas de eficiencia energética
Con el objetivo de que la huella ecológica del edificio fuera la mínima posible desde su propia construcción, se prefabricó el edificio en un taller de Barcelona y se trasladó a Zamora para su montaje, el cual duró solamente una semana. Otra técnica utilizada fue la creación de un invernadero en el comedor para atemperar el aire existente en invierno y permitir la ventilación cruzada en el módulo salón/comedor en verano.
En línea con los cinco principios básicos del Estándar Passivhaus, los arquitectos han instalado: un sistema de ventilación mecánico con recuperador de calor que permite una ventilación controlada del edificio; un gran aislamiento térmico en fachadas, cubiertas y solera, así como una cubierta ajardinada; y un sistema de climatización mediante suelo radiante/refrescante en todo el edificio procedente de fuentes renovables que se basan en extraer energía del aire exterior mediante una bomba de calor y que es utilizado también para la producción de agua caliente sanitaria con el apoyo de 5 paneles solares térmicos.
Certificación Passivhaus Classic
La residencia, diseñada por CSO Arquitectura, acaba de recibir la certificación Passivhaus Classic, lo que la convierte en la primera residencia de ancianos certificada bajo este estándar en España y una de las quince primeras certificadas de Europa.
El edificio cumple con los requisitos que establece este estándar: una demanda energética para calefacción y refrigeración menor o igual a 15 kWh/m² al año; una demanda de energía primaria menor o igual a 120 kWh/m² al año; y la práctica ausencia de infiltraciones de aire en el interior de la vivienda o edificio (menor o igual a 0,6 renovaciones por hora a 50 Pa).