El parque de Madrid Río suma un nuevo edificio sostenible que formará parte del skyline del sur de la ciudad de Madrid: la torre Riverside Homes. Se trata de un edificio residencial de 23 plantas y 72 m de altura, una esbelta torre desde cuya azotea se pueden contemplar las vistas de la ciudad de Madrid. Alberga viviendas de lujo con amplias terrazas en cuyo diseño y construcción se ha priorizado la sostenibilidad y el ahorro energético.
Formando parte de la arquitectura vanguardista y sostenible, con materiales y acabados de gran calidad, el apartado de la elevación ha sido confiado a Otis.
Tecnología de Otis en la accesibilidad del edificio
La torre está equipada con tres ascensores Otis Gen2 Life de 630 kg a 1,75 m/s que incorporan las tecnologías más avanzadas de la marca. Se trata de un modelo de alta velocidad fabricado en España que forma parte de la familia Gen2, lo que significa que no utiliza los tradicionales cables de suspensión y tracción a base de acero trenzado, como los ascensores convencionales, sino que está equipado con las exclusivas cintas planas de acero recubiertas de poliuretano propias de esta gama de Otis.
Las cintas son mucho más flexibles que los cables de acero trenzado, ya que estos, al tener mayor diámetro solo pueden ser curvados hasta un cierto punto para evitar la fatiga de los hilos de acero que lo componen. Aquellos hilos que quedan en el exterior de la curvatura son sometidos a estiramiento, mientras que los que quedan en el interior del radio de curvatura están sometidos a presión de contracción. Las cintas, en cambio, al tener poco grosor (menos de 3 mm) por disponer los hilos de acero en paralelo no tienen este problema y pueden flexionar hasta diámetros muy reducidos; de hecho, los ascensores Gen2 tienen poleas de tan solo 8 cm de diámetro, frente a las grandes poleas de 60 cm de los ascensores convencionales. Estas grandes poleas hacen necesaria la utilización de un reductor y, por lo tanto, de máquinas con engranajes que suponen una pérdida de la eficiencia energética.
En las máquinas de los Gen2, en cambio, al no existir reductor, el eje motor coincide con el conjunto de la máquina, es decir, la velocidad del eje del motor es la velocidad real de accionamiento de la polea que mueve el ascensor, eliminando la utilización de partes móviles y evitando pérdidas de rendimiento originadas por el rozamiento entre elementos mecánicos, y permitiendo el uso de motores con menor potencia nominal, lo que incide de forma directa en el consumo energético. Además supone una disminución significativa de ruidos y vibraciones, así como un aumento de la fiabilidad y de la durabilidad, al haber menos partes móviles susceptibles de avería o desgaste.
En este sentido, el hecho de utilizar cintas recubiertas de poliuretano y poleas planas también contribuye a un funcionamiento más suave y silencioso, ya que se evita el efecto metal contra metal que se produce entre los cables tradicionales de acero con las poleas convencionales, que han de tener ranuras para aumentar la superficie de contacto. Este contacto de metal contra metal crea un inevitable desgaste acentuado por el efecto cuña de las ranuras de las poleas, algo que no se produce en el caso de los ascensores Gen2 al utilizar poleas planas y cintas recubiertas de poliuretano. De hecho las cintas de los Gen2 duran el doble que los cables de acero trenzado. Este es, por lo tanto, otro factor que incide en la mejora de la durabilidad, al margen de mejorar también el confort de los pasajeros.
Máquinas un 50% más eficientes
Las máquinas de los ascensores Otis Gen2 con los que está equipada la emblemática torre Riverside tienen un motor eléctrico síncrono con estator constituido por imanes permanentes de material sintético, dentro de un diseño radial, lo que hace que sean un 50% más eficientes y un 80% más pequeñas que las máquinas convencionales.
Estos motores de última generación no solo tienen un consumo más reducido al no necesitar una corriente de excitación en el rotor, sino que cuando son alimentados mediante un variador de frecuencia y tensión reducen la intensidad consumida durante el arranque de manera muy significativa.
Estas máquinas cuentan con rodamientos encapsulados y sellados de por vida que no necesitan ser engrasados. Las cintas recubiertas de poliuretano, al contrario que los cables de acero trenzado, tampoco precisan lubricación, por lo tanto con estos ascensores se logra evitar la generación de residuos contaminantes, evitando así posibles agresiones al medio ambiente.
Para garantizar el óptimo mantenimiento de las características fundamentales de las cintas de tracción de los ascensores Gen2 durante su vida útil, incorporan el dispositivo Pulse, que monitoriza su estado 24 horas al día, siete días a la semana. Para ello se mide la continuidad eléctrica mediante el paso de una corriente a través de los hilos de acero internos de las cintas, avisando inmediatamente de la posible existencia de hilos rotos o defectuosos, lo que constituye un sistema mucho más fiable que la mera inspección visual que se lleva a cabo en el caso de los tradicionales cables.
Monitorización del funcionamiento de los ascensores
Además, los ascensores Otis Gen2 Life de la torre Riverside están dotados con el sistema eView. Este sistema recoge los datos de los parámetros de funcionamiento del ascensor, monitorizándolos de forma continuada y permanente, lo que proporciona una valiosa información que se analiza, interpreta y se pone a disposición de los técnicos de Otis, equipados con smartphones de última generación y apps, a través de las cuales acceden a dicha información, optimizando y priorizando los trabajos de mantenimiento, lo que redunda en un mejor servicio, más eficiente y personalizado.
El sistema eView incorpora además una pantalla de alta resolución que constituye una ventana al exterior para los pasajeros del ascensor, ya que emite información general, como noticias, deportes, la predicción meteorológica, etc., o personalizada del propio edificio, además de permitir no solo oír, sino también ver a los agentes del centro de atención 24 horas de Otis.
Los ascensores Gen2 Life de la torre Riverside incorporan también los drives regenerativos ReGen. Estos drives se basan en la actuación sobre los procesos de deceleración y frenado y en el comportamiento del motor eléctrico según el sentido del viaje y la carga en cabina. En los casos favorables (cuando la fuerza de la gravedad contribuye al movimiento), la carga ayuda al motor, que actúa entonces como un generador, proporcionando energía eléctrica que puede introducirse en la red eléctrica del edificio para su aprovechamiento en el funcionamiento de otros aparatos eléctricos.
Reducción del consumo energético
Los drives regenerativos ReGen producen energía limpia, lo que supone una menor distorsión de la electricidad utilizada por el edificio, ayudando a proteger los equipos sensibles. Esto se debe a que minimizan la distorsión de onda sinusoidal de la corriente de entrada, reduciendo la distorsión por armónicos a sólo el 5%, mientras que los no regenerativos con resistencias de disipación pueden llegar a causar distorsiones por encima del 80%.
De esta manera, aparte de reducirse notablemente el consumo del ascensor, se logra un mayor confort de viaje para los pasajeros, ya que los drives regenerativos controlan las aceleraciones y deceleraciones variando la frecuencia y la intensidad para que éstas sean suaves y progresivas y logrando una precisión de parada de, como máximo, +/-3mm de desnivel entre la pisadera de cabina y el piso.
Además, los ascensores Otis Gen2 de la torre Riverside disponen de iluminación LED que, combinada con el apagado automático, reduce el consumo energético hasta en un 75% respecto a los tubos fluorescentes. Y sus cuadros de maniobra de bajo voltaje reducen el consumo en modo de espera en un 50%.
En definitiva, un edificio singular equipado con la última tecnología del mercado en materia de ascensores, que, sin duda, contribuyen a la sostenibilidad del mismo.
Elementos constructivos sostenibles
El edificio, diseñado por el arquitecto Julio Touza y promovido por Neinor Homes, destaca por elementos como la fachada ventilada y un adecuado dimensionamiento de las ventanas, que garantizarán un mejor aislamiento térmico y acústico.
La fachada ventilada está formada por panel composite de aluminio, con aislamiento térmico por el exterior evitando así los puentes térmicos y reduciendo la demanda energética de la vivienda, combinada con petos de panel prefabricado de hormigón. Las cubiertas planas invertidas garantizan un mejor aislamiento térmico, impermeabilizada con doble tela asfáltica y aislamiento con planchas rígidas.
La carpintería de las ventanas son de aluminio lacado con rotura de puente térmico, monoblock, de apertura abatible y oscilobatiente o corredera. El acristalamiento de todas las ventanas será doble con cámara de aire deshidratado, con lunas interiores bajo emisivas para una mayor eficiencia energética y mejora del bienestar y de la envolvente térmica del edificio. Las persianas son de lamas de aluminio lacado, con aislamiento inyectado térmico y acústico en el interior de las mismas.