La Xunta de Galicia ha conseguido por primera vez la certificación forestal FSC (Forest Stewardship Council), para tres de sus montes, siendo además la primera entidad pública española que incorpora en ella el cálculo de captura y almacenamiento de carbono. Estos bosques almacenan de forma natural más de 100.000 t de CO2 equivalente.
FSC es una organización internacional que certifica los bosques a partir de un modelo de gestión forestal ambientalmente responsable, socialmente beneficioso y económicamente viable.
Desarrollo sostenible del mundo rural
Galicia es la comunidad autónoma con la mayor tasa de aprovechamiento maderero, con cerca del 60% del volumen de talas en España, según informa FSC. Los tres montes certificados, uno en la provincia de Lugo (Montareda y Corredoira en A Pastoriza) y dos en la de A Coruña (Carboeiro, en A Laracha, y A Braxe, en Cedeira), suponen un importante avance en la lucha contra la crisis climática y el desarrollo sostenible del mundo rural.
En el pasado mes de diciembre se auditó el sistema de gestión forestal de los montes titularidad de la Xunta, así como otros en convenio o consorcio con ella. El 14 de enero se obtuvo el certificado FSC sobre dicho sistema y se incluyeron tres montes que en total suman 535,26 hectáreas, cuyo número será ampliado en los próximos meses.
Se trata de montes de robles, pinos, castaños y abedules, tanto naturales como plantaciones, en donde se ha certificado también el cálculo del carbono que de manera natural almacenan sus árboles, en total 117.284 t de CO2 equivalente.
Almacenamiento de carbono
FSC puso en marcha en el año 2018 una serie de novedosas herramientas para la certificación de los servicios del ecosistema. Su finalidad es demostrar ante terceros que en el bosque se preservan otros beneficios naturales más allá de la extracción de madera, resina, setas o corcho, tales como el almacenamiento de carbono, producción de agua potable y suelos fértiles, biodiversidad o servicios recreativos.
En los nuevos estándares se han definido los requisitos para que los titulares de certificados FSC puedan demostrar de manera creíble el impacto de sus actividades en el mantenimiento, la conservación, la restauración o la mejora de los servicios del ecosistema.
Estas herramientas pretenden facilitar a los titulares de certificados de gestión forestal FSC un mejor acceso a los mercados emergentes de servicios del ecosistema a través de declaraciones basadas en impactos verificados, así como mejorar el acceso a la financiación para la preservación de estos servicios.