Un bloque de viviendas en Fuengirola, Málaga, ha mejorado notablemente la eficiencia energética tras la reciente rehabilitación de la cubierta, que se ha llevado a cabo mediante el sistema SIATE de impermeabilización y aislamiento térmico exterior de Onduline.
La cubierta original del edificio presentaba una degradación considerable como consecuencia de diversas patologías, debidas a filtraciones de agua y falta de aislamiento térmico. El sistema SIATE de cubierta de Onduline ha sido la solución instalada. Esta obra de rehabilitación energética ha podido beneficiarse de una subvención del fondo europeo de 175.000 euros.
Proceso de rehabilitación de la cubierta
La actuación se ha producido sobre una superficie total de unos 1.200 m2 de cubierta en la que además de retirar toda la cobertura original compuesta por las placas originales de fibrocemento con amianto, el sistema SIATE de cubierta Onduline se ha suplementado con aislamiento en lana de roca entre rastreles.
Tras la retirada de la cobertura original se ha procedido a la sustitución del entramado de cubierta, saneando las zonas dañadas por la filtración de agua de lluvia y regularizando el soporte para montar un nuevo entramado estructural de madera con tratamiento hidrófugo. Se ha procedido a la colocación de una capa de lana de roca de densidad media de 5 cm entre dicho enrastrelado, para suplementar el aislamiento térmico de la cubierta.
Después se ha instalado el sistema SIATE de cubierta Onduline, que es el sistema de impermeabilización y aislamiento térmico de cubierta. Este sistema integral se compone de dos elementos principales: el medio panel sándwich de madera Ondutherm Basic y las placas asfálticas onduladas impermeables Onduline Bajo Teja DRS. De su combinación se consigue una cubierta ligera, aislada, impermeabilizada y ventilada.
Con este tipo de sistema de cubierta microventilada, el aire circula tanto por el espacio inferior a la impermeabilización (placas asfálticas onduladas), ventilando el aislamiento (medios paneles sándwich de madera), y circula también por el espacio superior a las placas asfálticas onduladas, ventilando el área que queda entre las tejas y la impermeabilización. Como resultado final se obtiene una cubierta de altas prestaciones dotadas de aislamiento térmico, ventilación e impermeabilización, que aseguran óptimas condiciones de durabilidad y notable ahorro energético.