Bajo el título ‘Circularidad en el sector de la Construcción’, la pasada semana se celebró en Valencia el encuentro interregional del proyecto Reduces, que promueve la cooperación y el desarrollo de modelos sostenibles de economía circular, y en el que participó la Dirección General de Innovación Ecológica en la Construcción y el Instituto Valenciano de la Edificación (IVE) de la Generalitat Valenciana.
El proyecto Reduces se basa en la cooperación entre diferentes países que promueven el intercambio de conocimiento y buenas prácticas entre regiones para catalizar el cambio en cada una de las regiones participantes hacia un modelo de economía circular. En este caso, los participantes han sido las regiones o provincias de Utrech, Maramures, sudeste finlandés, Bulgaria, Greater, Manchester y la Comunidad Valenciana.
Por parte de la Comunidad Valenciana participan el IVE, la Universitat Politécnica de València como socios del proyecto Reduces, y la Vicepresidencia Segunda y Conselleria de Vivienda y Arquitectura Bioclimática.
El objetivo de esta jornada fue reflexionar sobre el desarrollo sostenible mediante el uso de modelos de economía circular. «El intercambio de experiencias y conocimientos intra e interregional resulta clave en el desarrollo de planes de acción que permitan apoyar modelos de negocios ambientalmente sostenibles dentro de cada región», señaló la directora general de Innovación Ecológica en la Construcción, Nuria Matarredona.
Esta sesión se enmarcaba en un encuentro que durante dos días reunía a una veintena de expertos del sector para debatir, analizar y exponer las novedades, así como los avances en materia de economía circular, nuevos modelos de negocio basados en principios circulares, ahondando en aquellos que promuevan la prolongación de la vida útil de los productos.
Estrategias de colaboración hacia un modelo circular
Durante el encuentro, se presentaron ejemplos de buenas prácticas presentes en la Comunidad Valenciana, centrados en alargar la vida útil de los productos, uno de los principales retos a abordar para conseguir la transición hacia un modelo circular.
La directora general recordó que el proyecto Reduces constituye una red de cooperación entre regiones que se encuentran a diferentes niveles de desarrollo en economía circular y que «tiene un fuerte compromiso en apoyar a las empresas en transición a la misma».
En el ámbito de la edificación, según apuntaba Matarredona, un diseño de los edificios flexible, modular y preparado para un posterior desmontaje, así como un correcto mantenimiento, son estrategias clave a tener en cuenta a la hora de alargar la vida útil de estos.
Durante su intervención, la directora general de Innovación Ecológica en la Construcción señaló la importancia de transformar los principios de la economía circular en estrategias políticas que permitan desarrollar un modelo sostenible. Sobre el encuentro, Matarredona destacó el trabajo que se realiza a través de los diferentes actores que participan en definir estrategias de colaboración, así como criterios de evaluación para establecer las buenas prácticas que servirán como base.