La Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA), que es la autoridad supervisora del sistema financiero de la Unión Europea en lo referido a valores y mercados financieros, ha publicado recientemente su Estrategia sobre Finanzas Sostenibles. La estrategia establece cómo la ESMA posicionará la sostenibilidad en el centro de sus actividades al incorporar factores ambientales, sociales y gubernamentales (ESG, por sus siglas en inglés) en su trabajo.
Las prioridades fundamentales de la ESMA incluyen la transparencia, el análisis de riesgo de los bonos verdes, la inversión en ESG, la convergencia de prácticas nacionales de supervisión sobre factores ESG, taxonomía y supervisión.
Steven Maijoor, presidente de la ESMA, afirma que «los mercados financieros están en un punto de cambio, con las preferencias de los inversores cambiando hacia productos verdes y socialmente responsables, y con factores de sostenibilidad que afectan cada vez más a los riesgos, los rendimientos y el valor de las inversiones. La ESMA, con su visión general de toda la cadena de inversión, se encuentra en una posición única para apoyar el crecimiento de las finanzas sostenibles al tiempo que contribuye a la protección de los inversores, a los mercados financieros estables y ordenados».
Prioridades de la ESMA sobre la financiación sostenible
Una de las prioridades de la ESMA que se destacan en la estrategia es la de completar el marco regulatorio sobre obligaciones de transparencia a través del Reglamento de Divulgaciones. La ESMA trabajará con EBA y EIOPA para producir estándares técnicos conjuntos.
La estrategia incluirá un capítulo dedicado a informar sobre tendencias, riesgos y vulnerabilidades (TRV, por sus siglas en inglés) de las finanzas sostenibles, que se verá reflejado en el Informe TRV. Este incluirá indicadores relacionados con bonos verdes, inversiones ESG y con el comercio de derechos de emisión.
Otra de las prioridades integradas en la estrategia es la utilización de datos a su disposición, para analizar los riesgos financieros del cambio climático, incluidas pruebas de estrés potencialmente relacionadas con el clima en diferentes sectores del mercado.
ESMA buscará la convergencia de las prácticas nacionales de supervisión de los factores ESG con el objetivo de mitigar el riesgo de blanqueo ecológico (greenwashing), prevenir las prácticas de venta indebida y fomentar la transparencia y la fiabilidad en la presentación de información no financiera.
Asimismo, participará en la Plataforma de la UE sobre financiación sostenible que desarrollará y mantendrá la taxonomía de la UE y supervisará los flujos de capital hacia la financiación sostenible.
Por último, la ESMA garantizará el cumplimiento de las directrices de ESG en las entidades que la propia ESMA supervisa directamente, al tiempo que aceptará cualquier nuevo mandato de supervisión relacionado con las finanzas sostenibles.
Red de Coordinación sobre Sostenibilidad
El trabajo de la ESMA abarca la cadena de inversión desde el emisor hasta los fondos de inversión, las empresas de inversión y los inversores minoristas. Ya ha cumplido varios objetivos del plan de acción de la Unión Europea para financiar el crecimiento sostenible y continuará ayudando a las instituciones de la UE a lograr objetivos financieros sostenibles, incluso proporcionando asesoramiento sobre áreas en las que pueden ser necesarias nuevas medidas de Nivel 1 y Nivel 2.
Para ayudar a llevar a cabo su estrategia, la ESMA estableció una Red de Coordinación sobre Sostenibilidad en 2019. La red está compuesta por expertos de las autoridades nacionales competentes y el personal de la ESMA. Será apoyado por un grupo de trabajo consultivo de partes interesadas, que se establecerá en los próximos meses.