La compañía fabricante de cemento y hormigón para la construcción sostenible LafargeHolcim ha completado la certificación del control de producción de las 19 plantas de hormigón que operan en España. Con esta certificación se vigilará el control de los aspectos medioambientales, entre otros criterios técnicos.
La compañía se adelanta así al plazo de abril de 2021 marcado por la legislación para poder seguir operando. Se trata de un certificado obligatorio, emitido por AENOR y requerido por el Ministerio de Industria, conforme al Real Decreto (RD) 163/2019, que establece los criterios técnicos que deben cumplir las centrales de hormigón para la realización del control de producción.
Esta certificación tiene cuatro años de validez y, pasados dos años desde su emisión, debe realizarse una inspección por parte de la entidad certificadora. A partir del próximo 1 de abril de 2021, toda empresa que no haya sido certificada no podrá suministrar hormigón, lo que supone que los clientes de LafargeHolcim tienen garantizado el suministro a esa fecha.
Compromiso medioambiental de LafargeHolcim
El compromiso medioambiental es un aspecto fundamental en todo el ciclo de vida de la actividad de LafargeHolcim. Marián Vidal, directora de Calidad de Hormigones de LafargeHolcim España, señala que “con esta certificación, y a través de las inspecciones realizadas por las entidades autorizadas, se vigilará, entre otros, el control de los aspectos medioambientales de cada una de las plantas de hormigón auditadas. Además, desde la compañía hemos querido dar un paso más allá de los requisitos exigidos por el RD 163/2019 en relación al control de los aspectos medioambientales, por lo que recientemente hemos obtenido el certificado voluntario de AENOR en base a la norma UNE-EN ISO 14001:2015 (Sistema de Gestión Ambiental), en una
primera fase para seis de nuestras plantas”.
La compañía ha recibido recientemente el doble sello ‘Calculo y Reduzco‘ otorgado por la Oficina Española de Cambio Climático (OECC) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. A través de este registro voluntario, se compromete a realizar un inventario de su huella de carbono para sus actividades de cemento y hormigón y a reducirla, convirtiéndose así, según indica la compañía, en la primera empresa del sector del cemento y el hormigón en España en hacerse con este distintivo.
A nivel internacional, la compañía cementera se ha unido a la iniciativa Science Based Targets (SBTi) ‘Business Ambition for 1,5° C’, convirtiéndose, tal y como afirma LafargeHolcim, en la primera empresa global de materiales de construcción en firmar el compromiso con objetivos intermedios para 2030.