El primer paquete de fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia ya ha sido aprobado por el Gobierno, que destinará alrededor de 581 millones de euros a financiar proyectos en materia de residuos y economía circular, saneamiento y depuración, y conservación de la biodiversidad.
El Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), ha acordado esta semana autorizar la distribución territorial del primer paquete de fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Con una dotación de 581.121.060 euros se financiarán proyectos en materia de saneamiento y depuración en aglomeraciones urbanas de menos de 5.000 habitantes, apoyo a la implementación de la normativa de residuos, y en materia de conservación de la biodiversidad se llevará a cabo la corrección de tendidos eléctricos para evitar daños a la avifauna.
La distribución de estas primeras subvenciones tendrá ahora que ser sometida a la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente. Todos estos proyectos han sido, desde su inicio, informados, analizados y participados por las Comunidades Autónomas.
Cumplimiento de los requisitos medioambientales de la UE
Este primer paquete, con incidencia en el territorio y efecto capilar, es coherente con los requisitos de la Unión Europea para que al menos el 37% de los recursos del plan de recuperación se destinen a la descarbonización y la transición ecológica, y el 100% cumplan con el principio de no dañar el medio ambiente, según ha explicado la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
Este paquete de inversiones “es una muestra de nuestro compromiso para avanzar en las reformas estructurales y los proyectos de inversión necesarios para transformar y modernizar de manera integral la economía española y su tejido productivo”, ha señalado Ribera.
Residuos y economía circular
En materia de residuos y economía circular, se ha aprobado el reparto de los fondos del plan de apoyo a la implementación de la normativa de residuos, dotado con más de 416.250.000 euros. Además, a este plan se suman un Programa de Economía Circular, dotado con 1,87 millones de euros, y el PIMA residuos (Planes de Impulso al Medio Ambiente), dotado con 3 millones de euros.
Estas actuaciones tienen por objeto acelerar las inversiones necesarias para mejorar la gestión de los residuos en España y garantizar el cumplimiento de los nuevos objetivos comunitarios de reciclado y preparación para la reutilización de los residuos municipales, potenciando la recogida y el tratamiento separado como herramienta para mejorar el aprovechamiento de materiales e implementar la economía circular.
La implementación de nuevas recogidas separadas para distintos tipos de residuos (como biorresiduos y textiles, por ejemplo) son obligaciones que quedarán recogidas en el proyecto de Ley de Residuos y Suelos Contaminados, que en breves fechas irá al Consejo de Ministros para su remisión a las Cortes. En el caso de los biorresiduos, el hecho de que se recojan separadamente hace que desciendan las emisiones de metano, al tiempo que mejora la eficiencia en la gestión del resto de fracciones de residuos, por ejemplo.
Gestión del agua y conservación de la biodiversidad
En materia de saneamiento y depuración, la primera línea cuyos fondos pueden distribuirse a los territorios es aquella que afecta a actuaciones en aglomeraciones urbanas de hasta 5.000 habitantes. La dotación de este plan es de 100 millones de euros y el objetivo es impulsar las inversiones para que puedan cumplir con las obligaciones establecidas en la directiva sobre tratamiento de aguas residuales.
En cuanto a la conservación de la biodiversidad, se ha acordado el reparto de 60 millones de euros en actuaciones de corrección de tendidos eléctricos para evitar daños a las aves. La electrocución de la avifauna en estructuras de conducción eléctrica se ha convertido en el principal problema de conservación para muchas de las especies incluidas en el Catálogo Español de Especies Amenazadas. Existen estimaciones conservadoras que se refieren a que cada año mueren electrocutadas o por colisión con tendidos al menos 39.000 ejemplares.