En su compromiso por alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenibles y en línea con su Estrategia de Sostenibilidad, Sika España ha presentado los principales hitos medioambientales obtenidos en 2020, entre los que destacan la reducción de un 61% de emisiones de CO2 y de un 30% de consumo de energía, en comparación con el año 2019. Sika continúa trabajando en su Estrategia de Sostenibilidad de cara a 2023, en la que prevé una reducción del 12% de emisiones de CO2 y del 15% de consumo de energía por tonelada vendida.
“Nuestro objetivo más importante es reducir nuestra huella de CO2 en un 12% para 2023. Hemos conseguido alinear nuestro proceso productivo con los ODS, consiguiendo una reducción de más de 1.200 t de emisiones de CO2 gracias a una continua optimización de nuestros procesos internos, así como al uso de electricidad 100% procedente de fuentes de energía renovables. Esta reducción equivale a la plantación de casi 62 millones de árboles y a la eliminación de la circulación de 212.000 coches durante un día”, destaca Ana Carmona, Sustainability Manager Region EMEA de Sika.
Reducción del consumo del agua, energía y emisiones de CO2
El consumo de agua y la generación de residuos también han conseguido una importante reducción, de un 45% y un 14,3%, respectivamente, con respecto a 2019. A ello ha contribuido la implementación de circuitos cerrados de refrigeración en sus procesos productivos, o la instalación de una nueva planta de tratamiento de aguas residuales.
La sostenibilidad es el principio básico de la estrategia que, implementada desde 2014, fue diseñada por la compañía bajo el lema ‘Más valor, menos impacto’, para conseguir influir positivamente en los ODS a través de un trabajo responsable y eficiente.
La reducción de emisiones de CO2 y de consumo de la energía, la innovación y la eficiencia operacional se encuentran en el ADN de esta Estrategia. Para ello, y con vistas a 2023, Sika se compromete a reducir un 12% las emisiones contaminantes por tonelada vendida; a investigar, desarrollar y comercializar productos nuevos más sostenibles, en combinación con altas prestaciones; y a invertir estratégicamente para la mejora de la eficiencia energética y la reducción de la huella de carbono.
Compromisos para mejorar la sostenibilidad
Para conseguir sus objetivos, Sika se ha centrado en desarrollar una cartera de soluciones con una sostenibilidad mejorada. “Nuestros sistemas de reparación refuerzan, impermeabilizan, aíslan, protegen y reparan edificios y estructuras, consiguiendo un menor consumo de agua. La tecnología de Sika permite una reducción de hasta el 40% del contenido de este recurso en el hormigón, al tiempo que los sistemas de impermeabilización previenen, por ejemplo, la filtración y contaminación del agua potable en depósitos y plantas de tratamiento”, explica Ana Carmona.
Asimismo, la compañía apuesta por una gestión responsable de los recursos y los costes, con el compromiso de reducir un 15% el consumo de energía, aumentar al máximo el uso de energía renovable, la reducción de un 15% en el consumo de agua y de otro 15% en la generación de residuos por tonelada vendida, y por último, aumentar hasta un 25% frente al total, el residuo destinado a su reutilización.
En este camino por situar la sostenibilidad en el centro de las acciones, Sika seguirá desarrollando nuevas soluciones para cubiertas verdes, que ahorran energía y aminoran el efecto isla de calor, y para cubiertas frías, que consiguen un ahorro anual de, al menos, un 10%.
Por otra parte, a través de ‘Sika Cares’, la compañía apoya activamente proyectos sociales a nivel local en todo el mundo. “Como miembros de la iniciativa de la ONU Global Compact trabajamos por el desarrollo global sostenible. Contamos con un código de conducta que se basa en los principios de la ONU, y nos aseguramos de que también nuestros proveedores cumplan los mismos requisitos que nos imponemos a nosotros mismos. De esta forma contribuimos a mejorar las condiciones laborales, y nos aseguramos de cumplir leyes y regulaciones locales sobre salud, seguridad y el medio ambiente”, explica Ana Carmona.