El G20 ratifica su compromiso con la biodiversidad, la economía circular y las finanzas sostenibles

La reunión de ministros de medio ambiente, energía y clima del G20 celebrada la pasada semana en Nápoles, Italia, finalizó con la aprobación de un importante comunicado conjunto (G20 Environment Communiqué Final), resultado de semanas de negociaciones. El documento ratifica el compromiso de los países del G20 en tres áreas clave: la protección de la biodiversidad, el uso eficiente de recursos y economía circular, y las finanzas sostenibles.

El encuentro reunió los pasados días 22 y 23 de julio a ministros de Medio Ambiente, Energía y Clima para promover la protección ambiental y la transición ecológica y energética.

El comunicado conjunto muestra el compromiso con la protección del capital natural y la restauración de ecosistemas con soluciones basadas en la naturaleza, defensa y restauración del suelo, protección de los recursos hídricos, océanos y mares, incluyendo la prevención y reducción de basura plástica marina.

El documento también plasma la visión del G20 sobre economía circular con un enfoque en ciudades circulares, educación y formación, entre otros. Se reconocen por primera vez los resultados del reciente informe de la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas (IPBES) y el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) lanzado el 10 de junio sobre el vínculo entre la biodiversidad y el cambio climático.

En cuanto a las finanzas sostenibles, el G20 se centra en las necesidades de financiación específicas para la protección y restauración de los ecosistemas como contribución al trabajo del G20 sobre la futura estructura del sistema financiero mundial.

Estrategias de neutralidad climática

La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha valorado positivamente la declaración, que confirma el compromiso de actuar para cumplir con el objetivo de limitar el aumento de la temperatura en 1,5ºC con respecto a los niveles preindustriales, en línea con el IPCC. Este acuerdo por parte de las veinte grandes economías del mundo es una llamada a la urgencia para presentar estrategias de neutralidad climática en torno al 2050 y contribuciones nacionales más ambiciosas antes de la COP26, que se celebrará en noviembre en Glasgow.

En la declaración se ratifica el compromiso financiero de 100.000 millones de euros previsto en el Acuerdo de París y su desembolso anual hasta 2025 en línea con la transición energética, para lo que se requiere una alineación de los flujos públicos y privados, así como de los bancos multilaterales, que permita acelerar la descarbonización y desincentivar definitivamente infraestructuras que supongan una desaparición más lenta de las emisiones.

Los países del G20 reconocen el papel clave que desempeñan los paquetes nacionales de recuperación bien diseñados en la orientación de las acciones a corto plazo y en la definición y el apoyo de estrategias a largo plazo para lograr los objetivos de París. También reconocen las oportunidades que ofrecen las tecnologías de vanguardia a la hora de implementar las distintas políticas e iniciativas. Este es un elemento clave en el caso de las ciudades, particularmente expuestas al cambio climático y, al mismo tiempo, actores fundamentales para mitigarlo. El G20 reconoce la importancia de favorecer y fomentar la colaboración en los entornos urbanos y áreas metropolitanas, así como de apoyar iniciativas como el Pacto Global de los Alcaldes o el C40.

La declaración también subraya la urgente necesidad de promover la movilidad sostenible y asequible, incluyendo todas las infraestructuras necesarias; invertir en tecnologías digitales para la integración de sistemas de energía renovable, almacenamiento o redes inteligentes; y fomentar las comunidades energéticas locales. Asimismo, pone el foco en el impulso de soluciones basadas en la naturaleza a fin de fundamentar las decisiones de planificación y los modelos financieros y comerciales sostenibles.

Destaca el compromiso del G20 de aumentar la acción en adaptación para responder a los riesgos e impactos del cambio climático, en especial en los países más vulnerables, para lo que se recoge el objetivo de elaborar estrategias para aumentar la resiliencia, incrementar la financiación y alinear los flujos financieros nacionales e internacionales considerando estos riesgos.

 
 
Patrocinio Oro
Patrocinio Plata
Patrocinio Bronce
Salir de la versión móvil