La empresa de sistemas de ventilación Siber participa en el proyecto de adecuación de aulas con ventilación mecánica impulsado por el departamento de Educación de la Generalitat de Cataluña, junto al departamento de servicio técnico de Cadaqués (Girona). Con la instalación de los sistemas de ventilación mecánica controlada de doble flujo EVO de Siber, esta iniciativa busca minimizar la transmisión del COVID-19 por vía aérea y mejorar la calidad del aire interior en las aulas.
Tal y como señala Siber, alrededor del 70% de las escuelas europeas superan los niveles máximos permitidos de CO2 y, a su vez, los centros educativos representan una quinta parte del parque de edificios del sector terciario. Debido a la falta de ventilación o a un sistema de renovación de aire defectuoso, así como a las altas tasas de ocupación de las aulas, el aire interior de estos edificios a menudo está viciado. En ambientes interiores, los aerosoles (pequeñas partículas en suspensión) se acumulan aumentando la carga viral. La exposición a este aire resulta un foco de infección y transmisión del COVID-19.
Es por ello que el proyecto en el que participa Siber se ocupa de garantizar la calidad del aire en las aulas, para que mediante la estrategia de ventilación más adecuada en cada momento se consiga la calidad del aire deseada.
Ventilación mecánica controlada de doble flujo EVO
La ventilación natural es la primera medida a aplicar para reducir la concentración de contaminantes en espacios cerrados y por lo tanto minimizar el riesgo de infección por enfermedades víricas transmitidas a través de aerosoles. Aún así, la ventilación natural no siempre es lo suficientemente efectiva mediante la abertura de ventanas, debido a cuestiones como la ubicación de estas y la propia geometría del aula.
Además, si se consideran aspectos como la falta de confort y el elevado consumo energético para el acondicionamiento térmico del aula (calefacción y/o clima) como consecuencia de la ventilación natural, se hace necesario la utilización de un sistema de ventilación mecánica controlada de doble flujo para garantizar una óptima ventilación del espacio.
Para cumplir con este objetivo, se han instalado los equipamientos de ventilación mecánica controlada de doble flujo EVO. Estos equipos renuevan el aire de forma continua asegurando el confort térmico, todo ello de una forma eficiente energéticamente, ya que aprovecha la temperatura del aula para atemperar el aire impulsado desde el exterior al interior una vez filtrado y purificado, por lo que se ventila sin desperdiciar la calefacción o refrigeración del aula.
Este sistema se ha diseñado para realizar un efecto barrido completo del aula, a la vez que mide los niveles de CO2, gracias a sondas y sensores que controlan el sistema de forma automática y autónoma, garantizando una óptima calidad del aire.
Prueba piloto en el IES Caritat Serinyana de Cadaqués
De momento, el IES Caritat Serinyana de Cadaqués es el primer espacio académico en el que se han implementado estas nuevas medidas. Más allá de la prueba piloto, el futuro es llevar la ventilación mecánica controlada a muchos más centros educativos, garantizando la salud y el confort en su interior en todo el territorio nacional.
Este no es el único proyecto en el que Siber participa como expertos en ventilación para garantizar la calidad del aire en las aulas. La compañía también forma parte del proyecto internacional 3SqAir, que tiene como objetivo abordar este tipo de desafíos mediante una estructura común para el espacio SUDOE, centrándose en soluciones inteligentes y sostenibles.
Siber señala que este tipo de instalaciones forman parte de las recomendaciones de los principales organismos públicos y asociaciones del sector, como son la guía sobre ventilación en las aulas elaborada a finales del año pasado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y técnicos de la Asociación Mesura, apoyados por el Ministerio de Ciencia e Innovación. Este documento plantea los sistemas de ventilación mecánica controlada y de purificación como una de las claves para reducir las probabilidades de contagio de COVID-19 por vía aérea.