El Plan Estratégico de Salud y Medio Ambiente (PESMA), que estará vigente hasta 2026, ha sido aprobado esta semana en la sesión extraordinaria del Pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud conjunta con la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente. El Ministerio de Sanidad, en coordinación con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), ha presentado este documento estratégico destinado a proteger a la población de los riesgos medioambientales.
Se trata de una herramienta de gestión adecuada para afrontar, desde el punto de vista de la salud humana, los grandes desafíos ambientales de la actualidad. En concreto, el PESMA se centra en promover entornos saludables para la población, reducir la carga de enfermedades e identificar nuevas amenazas para la salud derivadas de factores ambientales.
El proceso de elaboración del PESMA ha sido un ejercicio complejo y multidisciplinar que ha contado con la participación del personal técnico de ambos ministerios, además de más de un centenar de expertos de la ciencia y la sociedad españolas.
Ejes transversales y áreas temáticas del plan
El Plan Estratégico de Salud y Medio Ambiente incluye varios ejes transversales: Equidad, Enfoque de género, Transparencia y rendición de cuentas, Sostenibilidad, Salud en todas las políticas y Enfoque “One Health” de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que determina que la salud humana está íntimamente conectada con la salud del planeta, de todos los seres vivos, los ecosistemas, el medio ambiente común y los impulsores sistémicos pertinentes.
El PESMA contempla 14 áreas temáticas que tratan de abordar los factores de riesgo ambientales con mayor impacto en la salud e incluye acciones encaminadas a la creación de sistemas de vigilancia para el efecto de la contaminación atmosférica en la salud, la identificación de factores ambientales vinculados al desarrollo de enfermedades zoonóticas, y transmitidas por vectores, o la medición de los efectos de la contaminación acústica.
Desde la perspectiva medioambiental, se definen cuatro áreas temáticas que presentan riesgos para la salud: cambio climático y salud: riesgos del clima, temperaturas extremas y vectores transmisores de enfermedades; contaminación: productos químicos, residuos, calidad del aire, calidad del agua y contaminación industrial; radiaciones: radiactividad natural, campos electromagnéticos y radiación ultravioleta; hábitat y salud: ruido ambiental y vibraciones, calidad de ambientes interiores y ciudades saludables.
El documento constituye un compendio de múltiples acciones que se irán acordando y planificando en función de las necesidades, prioridades y recursos disponibles en los Programas de Actuación bienales, que especificarán plazos, recursos y los detalles necesarios para una correcta ejecución de las medidas.