La compañía Kömmerling, a través de la Fundación Purple Day, ha donado sus carpinterías para el proyecto de remodelación de la sala San Vicente del Hospital Infantil Niño Jesús en Madrid. Se trata de un espacio construido desde cero que ha tenido como objetivo mejorar la estancia de los niños ingresados y de sus familiares, incorporando a su vez sistemas que faciliten el trabajo del personal médico. Una reforma que ha sido posible gracias a la Fundación Purple Day, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid y diferentes empresas que decidieron sumar su apoyo.
La sala San Vicente es un centro de referencia nacional de enfermedades neurológicas, metabólicas y endocrinológicas, al que son derivados niños que sufren este tipo de patologías desde todos los puntos de España, ingresando al año 900 niños y sus familias.
Rehabilitación de la sala San Vicente
La arquitectura puede crear espacios positivos y confortables que hagan más llevadero toda la estancia hospitalaria y ese fue el objetivo de Arpada, empresa constructora que elaboró los primeros planos del proyecto, y que más tarde contó con la ayuda del estudio de arquitectura Morph para su desarrollo técnico.
Bajo el nombre de ‘El invernadero’ plantearon dotar a la sala San Vicente de una infraestructura que cumpliese con las condiciones técnicas y de última tecnología que debe contar un espacio sanitario de estas características. Así, se demolieron las instalaciones en su totalidad dejando un espacio diáfano en el que iniciar de cero la reconstrucción y para el desarrollo del proyecto se emplearon materiales de última generación que dotaron a la sala de protección térmica y acústica.
Aislamiento y eficiencia energética
En este tipo de rehabilitaciones o reformas las ventanas son uno de los grandes puntos a tratar, siendo el elemento más débil de la envolvente ya que su elección influye directamente en el aislamiento y la eficiencia energética del proyecto.
Desde Kömmerling donaron las carpinterías al proyecto de reforma de esta sala donde se instalaron más de 35 ventanas practicables con el sistema EuroFutur Elegance, en color blanco y acompañadas del cajón de persiana RolaPlus motorizado. Se trata de una combinación que dota a la nueva sala San Vicente de un elevado nivel de aislamiento y confort, contribuyendo así a mejorar la estancia de los niños y sus familias. Además, la reducción de pérdidas energéticas que supone la instalación de estas nuevas ventanas repercutirá directamente en los consumos mensuales del hospital.
Pantallas de control conectadas a puestos médicos
Con la remodelación de la sala San Vicente se ha conseguido dotar de mayor espacio a las habitaciones, permitiendo la existencia de habitaciones dobles, en los momentos de alta demanda de la planta y consiguiendo que cada habitación disponga de baños adaptados. Por otro lado, se ha conseguido habilitar una unidad independiente para los estudios médicos vigilados sobre las Enfermedades Neurológicas (unidad de vídeo), así como la creación de espacios suficientes para el desarrollo de la actividad médica por parte del personal que opera en la planta.
Por último, en cuanto a la tecnología, la sala también ha incorporado diferentes sistemas y elementos que facilitan el control de los pacientes y su estancia en el hospital. Para ello, se ha instalado un sistema de cámaras en todas las habitaciones con pantallas de control conectadas a puestos de enfermería y médicos, lo que permite detectar si un niño está teniendo una crisis epiléptica e incluso analizar cómo se ha iniciado.