Las compañías están trabajando para ofrecer tecnologías y soluciones que sean eficientes, aporten beneficios y utilicen alternativas a los refrigerantes convencionales. El proceso de sustitución de los clorofluorocarburos se está acelerando en todo el mundo y la eliminación progresiva de las sustancias que agotan la capa de ozono ya se ha convertido en una responsabilidad internacional. Con este compromiso, Panasonic Heating and Cooling sigue ampliando su gama de soluciones de refrigeración utilizando el refrigerante natural de CO2.
Panasonic presentó su primera unidad de cadena de frío de CO2 para aplicaciones minoristas en Japón en 2010 y en Europa en 2017. Actualmente, la compañía dispone de una gama completa de soluciones de refrigeración innovadoras, incluida la presentación más reciente de sus unidades de 4HP de media y baja temperatura, lanzada a principios de 2022.
Refrigerante natural y sostenible
El CO2 tiene muchas ventajas como refrigerante natural frente a otras sustancias como, por ejemplo, ofrece muy buen coeficiente de transferencia de calor, tiene viscosidad muy baja, es relativamente insensible a las pérdidas de presión y tiene bajo impacto ambiental.
Debido a su rendimiento en calefacción y refrigeración, el CO2 se ha convertido en uno de los refrigerantes naturales más prometedores y se espera que se convierta en un referente para proyectos de climatización. La creciente gama de soluciones de refrigeración de alta calidad de Panasonic, impulsadas por el refrigerante natural CO2 (R744), ahora ofrece capacidades de refrigeración de 2kW a 16kW.
Las unidades son una solución ideal para una variedad de aplicaciones de refrigeración, incluidos armarios refrigerados, cámaras frigoríficas y congeladores en tiendas de alimentos, hoteles, tiendas de conveniencia, estaciones de servicio, atención médica (como laboratorios farmacéuticos), industria (procesamiento de alimentos, etc.) y almacenes.
La solución utiliza refrigerante CO2 natural, que no es tóxico ni inflamable, y tiene un ODP de 0 y un GWP de 1, lo que lo convierte en un refrigerante atractivo desde una perspectiva ambiental, ya que solo se liberan a la atmósfera sustancias naturales en caso de fuga. Además, tiene capacidades de recuperación de calor para mayor sostenibilidad.