Una fachada ventilada es la creación de una piel exterior anclada al cerramiento del edificio, que favorece el ahorro energético al interponer, entre ésta y el muro soporte, una cámara de aire y un material aislante. En Rosal Stones ofrecen piezas de piedra en gruesos calculados según material, formatos y características de la fachada, así como módulos estandarizados o personalizados, adaptados a cada proyecto.
Su aplicación es perfecta en la rehabilitación energética de viviendas ya existentes, pero también en obras de nueva construcción que deseen cumplir las condiciones más exigentes para edificios de energía casi nula (EECN), según el Código Técnico de Edificación en España.
Transmitancia térmica
Un sistema de fachada ventilada de piedra está formado, de interior a exterior, por los siguientes elementos: una estructura soporte, un aislamiento, una cámara de aire ventilada, un sistema de anclajes o fijación del revestimiento a la estructura soporte y un revestimiento a base de placas de piedra natural.
El aislamiento térmico de los cerramientos de fachada se obtiene a través del cálculo de la transmitancia térmica, que es la medida del calor que fluye por unidad de tiempo y superficie, transferido a través de un sistema constructivo.
La piedra Albamiel con unas emisiones de carbono de 0.87 Kg eq CO2/m2 (DAP. certificada INIES) en 4 cm, más aislante, consigue una transmitancia térmica de 0.16 W/m2 K.
Además de las ventajas en términos de aislamiento térmico, las fachadas en piedra natural Albamiel de Rosal Stones también tienen nula reacción al fuego, un bajo mantenimiento, ausencia de productos y otorga una larga vida a la edificación.