La Alianza Mundial para Edificios y Construcción (GlobalABC), financiada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), ha publicado el Informe sobre el estado mundial de los edificios y la construcción de 2022. El documento hace un seguimiento del progreso del sector de la construcción hacia el logro de los objetivos del Acuerdo de París y de limitar los efectos del calentamiento global.
Descarbonizar el sector de los edificios para 2050 es fundamental para lograr reducir las emisiones y abordar la pérdida de naturaleza y biodiversidad, así como la contaminación y los residuos. Sin embargo, según el informe, el sector no está realizando los cambios necesarios para encaminarse hacia este objetivo.
Acciones para apoyar la transición hacia la descarbonización
En 2021, las actividades de construcción se recuperaron a los niveles previos a la pandemia en la mayoría de las principales economías, junto con un uso más intensivo de energía de los edificios. Además, más economías emergentes aumentaron el uso de gases de combustibles fósiles en los edificios.
El informe indica que existen riesgos significativos para la trayectoria de descarbonización debido a la guerra en Ucrania y la consiguiente crisis energética en Europa. La volatilidad de los precios mundiales de la energía plantea otros riesgos, junto con la crisis del costo de vida que enfrentan las economías y las implicaciones de los aumentos de las tasas de interés en la inversión en la descarbonización de la construcción por parte de los gobiernos, los hogares y las empresas.
El liderazgo político y las organizaciones deben priorizar acciones que apoyen la transición hacia la descarbonización y la sostenibilidad del entorno construido, subraya el informe de la Alianza Mundial para Edificios y Construcción.
Aumentan las emisiones de CO2
En 2021, el sector de los edificios y la construcción representó alrededor del 37% de las emisiones de CO2 relacionadas con la energía y los procesos y más del 34% de la demanda de energía a nivel mundial.
El informe refleja que en 2021 las emisiones de CO2 relacionadas con la energía operativa del sector de los edificios alcanzaron un máximo histórico de alrededor de 10 GtCO2, un aumento que supera el nivel de 2020 en aproximadamente un 5% y el pico previo a la pandemia de 2019 en un 2%.
Por otro lado, la demanda de energía operativa en los edificios alcanzó un máximo histórico de 135 EJ, lo que supone un aumento de alrededor del 4% con respecto al período de 2020 y ha superado el pico anterior de 2019 en más del 3%.
Inversión en eficiencia energética
Los gobiernos han aumentado el nivel de inversión en eficiencia energética en línea con los niveles necesarios para respaldar el Acuerdo de París. En 2021, según los datos del informe, la inversión en eficiencia energética de edificios aumentó en un 16% sin precedentes desde 2020. Este escenario estuvo dominado por inversiones de países de la UE, EE.UU., Canadá y Japón.
El valor del sector de la construcción de edificios a nivel mundial aumentó un 5%, a más de 6,3 billones de dólares en 2021. Los aumentos globales en el costo de vida ejercerán presión sobre los costos de endeudamiento, pero el informe destaca que la eficiencia energética presenta un medio para moderar la volatilidad del costo de la energía y reducir las emisiones.
Carbono incorporado en los edificios
Asimismo, el informe sostiene que el carbono incorporado en los edificios necesita una acción inmediata para evitar socavar las reducciones de carbono logradas a partir de la eficiencia energética. Se estima que los materiales utilizados en la construcción de edificios representan alrededor del 9% de las emisiones totales de CO2 relacionadas con la energía.
A nivel mundial, aproximadamente 100.000 millones de toneladas de residuos son causados por la construcción, la renovación y la demolición, y alrededor del 35% se envía a los vertederos. Se prevé que el uso de materias primas se duplique para 2060, y el acero, el hormigón y el cemento ya son los principales contribuyentes a las emisiones de gases de efecto invernadero.
En las economías en desarrollo de rápido crecimiento, los materiales de construcción dominarán el consumo de recursos, y se espera que las emisiones de GEI asociadas se dupliquen para 2060.