El Ayuntamiento de Barcelona y la comunidad educativa de las 103 bressol municipales (escuelas infantiles) de la ciudad han presentado ‘Bressols pel Clima’, una estrategia común para afrontar la crisis climática. Esta estrategia es una hoja de ruta que concreta un total de 47 actuaciones que abordan la emergencia climática desde seis ejes distintos: naturalización de espacios, confort térmico, gestión de residuos, transición energética, educación ambiental y alimentación saludable.
La comunidad educativa de las bressol municipales (más de 25.000 personas entre niños, familias y educadoras) se suma así al Plan de Acción por la Emergencia Climática que Barcelona diseñó a partir de la declaración de emergencia climática del 15 de enero de 2020.
De esta forma, se comprometen a impulsar transformaciones hacia una ciudad más verde, más sostenible y climáticamente más justa con el horizonte 2030.
Renaturalizar los patios y explorar las cubiertas verdes
Las escuelas infantiles tienen espacios verdes propios que se pueden convertir en elementos vertebradores y conectores del verde urbano existente. Este eje prevé renaturalizar los patios de las escuelas infantiles plantando árboles y otras plantas, y abrirlos al conjunto de la ciudadanía, consolidando así el programa ‘Patios abiertos en el barrio’. Además, se habilitará un nuevo servicio itinerante de jardinería, con empresas de economía social y solidaria para garantizar el cuidado del verde durante todo el año.
Actualmente no hay ninguna escuela infantil municipal con cubierta verde. Sin embargo, se han identificado cubiertas que se podrían naturalizar, como la de la futura EBM Pere Calafell, en el distrito de Sant Martí, que abrirá el próximo curso 2023-2024, y que ahora se encuentra en construcción.
Confort térmico, refugios climáticos y reciclaje
Hoy en día ninguna escuela infantil municipal forma parte de la red de refugios climáticos de la ciudad. Pero la estrategia ‘Bressols pel Clima’ estudiará qué escuelas, y cuáles de sus patios, podrían incorporarse a esta red teniendo en cuenta la idoneidad geográfica y para la infancia. Está previsto que el próximo verano se incorporen a la red de refugios climáticos los cinco primeros patios de las escuelas infantiles. Este eje también aborda la cuestión del confort térmico de las escuelas y la necesidad de hacer un buen mantenimiento de los equipos de climatización, y si es necesario, mejorar la eficiencia energética de los equipamientos educativos.
Con respecto a la reducción, reutilización y reciclaje, cuatro de cada 10 escuelas infantiles participan u organizan algún tipo de mercado de intercambio de ropa, juguetes y diferentes utensilios de crianza; una iniciativa que contribuye a la reducción del consumo y que tiene un fuerte componente didáctico relacionado con la reutilización y la reducción de residuos.
Sensibilización ambiental
Actualmente 27 escuelas infantiles municipales forman parte de la red Escuelas + Sostenibles y Compromiso por la justicia climática. El objetivo de la estrategia ‘Bressol pel Clima’ es incorporar todas las escuelas infantiles en esta red con acciones concretas dentro de sus proyectos educativos.
Por otro lado, se diseñarán formaciones climáticas y ambientales dirigidas a los equipos educativos y las direcciones de las escuelas y se garantizará que todas ellas tengan parkings de bicicletas grandes y pequeñas, y de patinetes, para facilitar el uso por parte de las familias.