El proyecto de urbanización de la Solana de Valdebebas, en el distrito de Hortaleza, ha sido aprobado inicialmente por el Ayuntamiento de Madrid. El proyecto, de más de un millón de m2, contará con casi 1.400 viviendas, de las que el 45 % dispondrá de algún tipo de protección. El plazo total para las obras de urbanización será de 24 meses y la inversión prevista superará los 74 millones de euros.
El proyecto será ejecutado y costeado por la Junta de Compensación del ámbito con la supervisión del Área de Obras y Equipamientos.
La intervención se desarrollará en un ámbito situado entre la radial 2 y el municipio de Alcobendas, al oeste del Encinar de los Reyes. Además, el proyecto permitirá establecer el remate urbanístico y el nexo entre La Moraleja y el ámbito de la Ciudad Aeroportuaria y el parque de Valdebebas.
Casi 1.400 nuevas viviendas
El proyecto contará con casi 1.400 viviendas, entre unifamiliares y colectivas, de las que el 45% dispondrá de algún tipo de protección. Al norte, en las proximidades del municipio de Alcobendas, se plantean manzanas de vivienda unifamiliar con un máximo de tres alturas, con viarios interiores y espacios libres comunes, mientras que en el interior y al este del ámbito, se proyectan manzanas con bloques de vivienda colectiva de baja densidad (cuatro plantas). Respecto al uso terciario comercial, su superficie edificable alcanza los 8.500 m2, lo que supone el 3% del total.
Por otro lado, el proyecto destina 46.500 m2 a redes públicas de servicios colectivos (equipamientos, servicios públicos y deportivos), 141.500 m2 a viario local y 45.000 m2 a vía pública principal. Esto se complementa con una reserva de 104.000 m2 de suelo para usos dotacionales privados que den servicio a los vecinos de Madrid.
Ampliación del parque de Valdebebas
El proyecto tendrá 292.000 m2 de zonas verdes, contempla preservar el arroyo de Valdebebas y sus vaguadas, prevé la ampliación y finalización del parque de Valdebebas existente y diseñará un nuevo trazado para la vereda de los Toros, la antigua vía pecuaria que se amplía desde los 18.300 m2 de superficie a los 27.000 m2.
Asimismo, se recupera el antiguo Mirador de La Solana, un punto elevado situado en una posición muy céntrica, que se convertirá en espacio de encuentro con vegetación y árboles pensados para remarcar su valor simbólico.
Toda la intervención tiene como eje central el espacio público, nexo de relaciones sociales y culturales. Por eso, el proyecto potencia la movilidad peatonal y ciclista y se marca como objetivo facilitar el acceso al transporte público, reducir el tráfico motorizado privado en los desplazamientos internos y evitar el tráfico de paso.