En el primer trimestre de 2025, la compañía Cemex va a poner en marcha un nuevo molino terciario en la fábrica de Alicante que contribuirá a reducir considerablemente su huella de carbono. En el proyecto, denominado Molentis, se invertirán 6 millones de euros, de los que 4,4 proceden de las ayudas del Plan de Innovación y Sostenibilidad en el ámbito de la industria manufacturera del Ministerio de Industria, Energía y Turismo (Mincotur).
La eliminación de los combustibles fósiles en el proceso de fabricación del cemento es una de las apuestas de Cemex para reducir sus emisiones de CO2.
Reducción de 6.700 toneladas anuales de emisiones de CO2
La nueva instalación reducirá el tamaño y la humedad del Combustible Derivado de Residuos (CDR), que actualmente se dosifica en el quemador del horno. De esta forma se podrá aumentar la cantidad de este combustible alternativo en detrimento de los combustibles fósiles.
Actualmente, los CDRs son una alternativa con alto poder calorífico, más sostenible que los combustibles fósiles. Su uso conlleva menos emisiones de CO2 -debido a su alto contenido en biomasa- y evita su depósito en vertedero, así como las emisiones asociadas que conlleva.
Por otro lado, incorporar o incrementar el uso de CDRs como combustible en la industria supone introducir en el mix energético la economía circular, con la incorporación de un residuo como recurso, que hasta hace poco se desechaba y que constituía un grave problema medioambiental.
El proyecto Molentis ayudará a la fábrica de Alicante a incrementar en un 8% el uso de CDRs en su horno, lo que permitirá reducir las emisiones de CO2 en aproximadamente 6.700 toneladas anuales.
“Molentis va a permitir que sigamos trabajando hacia la neutralidad climática y que situemos a la fábrica de Alicante a la cabeza de las nuevas tecnologías y en la vanguardia de la industria descarbonizada”, ha explicado el director de Operaciones de Cemex en España, Benjamín Cabrera.
Proyectos de innovación en las plantas de Cemex
En los últimos años, Cemex está haciendo una cuantiosa inversión en proyectos de innovación en su planta de Alicante. Allí se ha instalado una nueva tecnología, que permite incorporar hidrógeno como una parte más de la mezcla de combustibles que alimenta su horno de cemento.
Asimismo, la fábrica cuenta con una instalación de secado de lodos. Se trata de un proyecto pionero en el que se transforma en combustible lodos procedentes de las depuradoras de la ciudad solo con el calor que desprende el horno.
Por otro lado, también avanza en la planta alicantina el proyecto Clyngas, una iniciativa cofinanciada por la Unión Europea, que se está empezando a construir y que permitirá a la cementera reducir sus emisiones de CO2 hasta en 406.000 toneladas en 10 años, a través de la sustitución de combustibles de origen fósil por un gas de síntesis obtenido a partir de residuos. En 2025 también entrará en funcionamiento una instalación fotovoltaica, que incrementará en un 10% la energía renovable que consume la fábrica.
La estrategia de descarbonización de Cemex, Futuro en Acción, continúa con paso firme en la fábrica de Alicante con el desarrollo de múltiples proyectos que van a ir reduciendo progresivamente las emisiones de dióxido de carbono en la producción de cemento hasta lograr el objetivo de neutralidad en carbono en 2050.