La asociación Círvite ha inaugurado en Madrid su primera reshogar, una residencia diseñada bajo los estándares internacionales de eficiencia energética Passivhaus y especializada en el cuidado de personas mayores con discapacidad intelectual o en proceso de envejecimiento prematuro. El proyecto recibió el galardón en la categoría Construcción Social en la 1ª edición de los Premios Saint-Gobain a la mejor práctica de construcción sostenible en España.
Al acto inaugural, celebrado el martes 15 de octubre, acudieron autoridades como Alejandra Serrano y Silvia Méndez, de la Dirección General de Atención a Personas con Discapacidad de la Comunidad de Madrid; así como Mª Ángeles Fernández, directora general de Gestión Urbanística; y Mª Aránzazu Amóstegui, subdirectora general de Patrimonio Municipal del Suelo, quienes destacaron la relevancia de este modelo innovador, distinguido por su alto nivel de eficiencia energética, sostenibilidad y confort ambiental clase A.
La compañía Saint-Gobain también estuvo presente en la inauguración, representada por Esther Soriano, directora general de Saint-Gobain Solutions.
Premio Saint-Gobain a la mejor práctica de construcción sostenible
Situado en el barrio madrileño de Canillejas, este nuevo centro cuenta con un área residencial, así como con un espacio de atención diurna. Su función es la de prestar una atención integral de calidad, tanto médica como psicológica y social, a un total de 45 personas.
El proyecto recibió el galardón en la categoría ‘Construcción Social’ en la 1ª edición de los Premios Saint-Gobain a la mejor práctica de construcción sostenible en España. La compañía destacó su empeño en el cuidado de personas mayores con discapacidad intelectual o envejecimiento prematuro, así como los beneficios que presenta en cuanto a la reducción del consumo energético del edificio en climatización y el confort acústico y térmico.
El premio a la mejor práctica en construcción sostenible es una iniciativa que forma parte de la estrategia de Saint-Gobain para involucrar a todas las partes interesadas en la transición del sector de la construcción en términos de sostenibilidad.
Máximo nivel de eficiencia energética
Una de las características principales de la reshogar es que se ha construido mediante el estándar de diseño Passivhaus, certificación emitida por el Passive House Institute de Alemania, que busca incorporar en las nuevas edificaciones el máximo nivel de eficiencia energética. Todo ello, de acuerdo con los retos marcados por la Agenda 2030 y según los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas 3, 7, 9, 10, 12, 13, 16 y 17.
Entre los beneficios que aporta, destaca la reducción, a menos de la mitad, del consumo energético en climatización, con la consecuente disminución de la huella de carbono e impacto medioambiental (sin empleo de combustibles fósiles). También es importante el confort térmico y acústico otorgado por la envolvente hermética, aislando el edificio para generar un entorno sin ruidos y muy confortable, con temperaturas que oscilan entre los 20-21 ºC.
La sostenibilidad de este modelo permite reinvertir los ahorros energéticos en mejorar la calidad de la atención. Un ejemplo tangible de este ahorro es la reducción de 6.000 euros anuales en suministros que equivale a 400 horas adicionales de apoyos personalizados, asegurando la viabilidad a largo plazo.