La Agencia de la Vivienda de Cataluña ha ampliado el plazo para solicitar las ayudas relativas a la mejora energética de edificios y viviendas y para la elaboración del libro del edificio y la redacción de proyectos de rehabilitación. Estas subvenciones, financiadas con fondos europeos Next Generation, contarán con un presupuesto conjunto de 17,6 millones de euros para toda Cataluña. El plazo para presentar las solicitudes permanecerá abierto hasta el 31 de diciembre de 2025.
La mayor parte de las subvenciones corresponde al programa 3 de ayudas a las actuaciones de rehabilitación para la mejora energética de los edificios, con una dotación de 14.940.000 euros. El programa 4 de ayudas a las actuaciones en el interior de las viviendas para la mejora energética contará en 2025 con una dotación de 1.198.851,65 euros; y el programa 5 de ayudas para la elaboración del libro del edificio existente para la rehabilitación y redacción de proyectos de rehabilitación, con 1.500.000 euros.
Para realizar la tramitación de las ayudas, las personas que tengan la vivienda ubicada en la ciudad de Barcelona deberán dirigirse al Consorcio de la Vivienda de Barcelona. En el caso de que la vivienda se sitúe en el Área Metropolitana de Barcelona, las personas interesadas deberán dirigirse al Consorcio Metropolitano de la Vivienda.
Por último, en el caso de que la vivienda se ubique en el resto de Cataluña, las personas interesadas deberán tramitar las ayudas a través de las oficinas locales de rehabilitación de la Agencia de la Vivienda de Cataluña.
Ahorro energético a través de la rehabilitación de las viviendas
Uno de los objetivos de las ayudas financiadas con fondos europeos Next Generation es luchar contra el cambio climático y promover el ahorro energético a través de la rehabilitación de las viviendas. Para ello, la Generalitat de Cataluña dispone de una dotación total de 480 millones de euros en subvenciones para cuatro programas de ayudas que le permitirán actuar en 65.000 viviendas.
Con esta dotación se conseguirá reducir el consumo de energía primaria no renovable, disminuir la demanda de energía para calefacción, agua caliente sanitaria y refrigeración con aire acondicionado, y eliminar el amianto. Estas mejoras de las viviendas y de su entorno cambiarán la forma tradicional de consumir energías gracias al fomento del autoconsumo y el aumento del uso de energías limpias.