Garantizar el suficiente caudal y la calidad de las aguas del Manzanares es el objetivo de los trabajos de construcción del estanque de tormentas y nuevo colector de Arroyofresno que ha visitado por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón. “Estas obras no sólo permitirán reintegrar plenamente cauce del río Manzanares a la vida cotidiana de la ciudad, sino garantizar un suficiente caudal, que gracias al tratamiento de las aguas, reunirá todas las garantías de calidad marcadas por la Unión Europea y por la Confederación Hidrográfica del Tajo”.
El estanque de tormentas de Arroyofresno, uno de los más grandes del mundo, tendrá, una vez finalizado, hasta 140 metros de ancho, 290 metros de largo y 22 de profundidad y una capacidad de 393.000 metros cúbicos, ocho veces el estanque de El Retiro.
Situado bajo el campo de entrenamiento de Golf del Club de Campo Villa de Madrid y en las cercanías del Manzanares, se encargará de retener las aguas pluviales después de recorrer las calles y espacios públicos de la ciudad, así como la procedente de la propia red de saneamiento de la zona noroeste de Madrid en los momentos de fuertes precipitaciones, para facilitar su correcta depuración posterior. De esta forma se evitan posibles inundaciones en el caso de fuertes lluvias, cuando el volumen de agua que discurre por el alcantarillado supera la capacidad de éste, y por otro se impide que se viertan directamente al río las primeras aguas de lluvia que son las más contaminadas.
Precisamente para evitar posibles inundaciones, además del estanque de tormentas, el Ayuntamiento está construyendo una nueva conexión con la red de saneamiento existente en la zona noroeste de Madrid, a través de un nuevo colector de 6,7 metros de diámetro y 3 kilómetros de longitud. Para la construcción de esta infraestructura se está utilizando una tuneladora con un diámetro de excavación de casi 7,4 metros.
Vinculadas a este proyecto se incluyen otras actuaciones como la creación de un aparcamiento soterrado con 816 plazas de capacidad, que liberará el espacio que actualmente ocupa en la superficie. En su conjunto, estas obras de Arroyofresno, que comenzaron en noviembre de 2005, cuentan con un presupuesto cercano a los 90 millones de euros y estarán concluidas en mayo de 2008.
Plan de Infraestructuras
Estos trabajos forman parte del Plan de Infraestructuras para la Mejora de la Calidad de las Aguas del Río Manzanares, puesto en marcha en 2005. Este Plan incluye la construcción de 34 nuevos kilómetros de colectores y 27 estanques de tormentas, que permitirán eliminar todo tipo de elementos contaminantes antes de que lleguen al cauce del río, y supondrá una inversión cercana a los 500 millones de euros. “Un presupuesto que convierte a este Plan en una iniciativa sin precedentes, que supera lo destinado en los últimos 30 años a la ejecución de los dos Planes Municipales de Saneamientos ejecutados en Madrid”, declaró el alcalde.
“También, debemos tener en cuenta -continuó Ruiz-Gallardón- que se trata de un proyecto que estamos desarrollando simultáneamente con otras iniciativas que afectan al río Manzanares, como el soterramiento de la M-30, de forma que sus resultados sobre la ciudad y los ciudadanos no sólo se sumarán, sino que se multiplicarán”.
El Plan de Infraestructuras, recordó el alcalde, no sólo afectará al término municipal de Madrid, sino que sus beneficios se extenderán a todo lo largo del curso del río, “trasladando la vocación solidaria de esta ciudad a materias medioambientales.”.
Estas actuaciones, además de ser imprescindibles para que las aguas del Manzanares tengan una adecuada calidad y caudal, también lo son para que Madrid sea, cada vez más, “un espacio medioambientalmente equilibrado”. “Si queremos hacer de Madrid una ciudad moderna, competitiva y atractiva para residir, trabajar o invertir, la calidad medioambiental y el desarrollo sostenible deben ser los protagonistas de esta transformación”.